En este momento de cambio global en las sociedades occidentales en el que la propia actividad productiva se está redefiniendo, se empiezan a apuntar también nuevos e importantes cambios en nuestro mercado laboral. Son tiempos de nuevas legislaciones y acuerdos normativos y también son tiempos de propuestas de cambio en el mercado de trabajo, en rrhh, en la actividad económica y, por supuesto, en la sociedad en general.
La formación, la cualificación, la capacidad de crear y de responder a las necesidades de una nueva actividad económica, están siempre en debate y forman parte ineludible de cualquier intención de mejora en el mercado de trabajo. Especialmente en una economía global que sitúa al conocimiento en el centro de su actividad.
El nuevo gobierno ya ha apuntado medidas como dar mayor presencia a la formación en la empresa, en el caso de la FP, o alargar la duración de la educación secundaria. Medidas que dan lugar a debates y consideraciones. Especialmente sobre si esto es lo que hoy necesita el sistema educativo en España o si se precisa un cambio más profundo que mejore la calidad de la enseñanza, que incluya la tecnología como recurso principal, y que sea capaz de incorporar contenidos como la creatividad y otros ya convertidos en esenciales.
En cualquier caso se habla de medidas a medio plazo y parece oportuno combinarlas con nuevas aportaciones que puedan ayudar a resolver problemas concretos a más corto plazo. Y estas no parecen estar surgiendo con la agilidad que precisa el mercado de trabajo, como demuestra la última convocatoria para la programación de acciones formativas dirigidas a personas en desempleo en Galicia.
La convocatoria comparte con el resto de España la falta de flexibilidad y cierta inadecuación a un mercado de trabajo en cambio constante. El imperativo de las aulas homologadas, la falta de peso de los Itinerarios Profesionales de Inserción o la separación de mucha de la oferta del propio tejido productivo continúan siendo lastres importantes para mejorar la cualificación de nuestro mercado laboral de forma eficaz. Lastres, por cierto, identificados desde hace años.
El problema es que ahora estamos ante una situación de inmensa urgencia que exige rapidez y valentía en las propuestas. La formación para el empleo de todo el próximo 2012 no puede ser, como se anuncia, casi de forma exclusiva en areas certificables en el marco de los certificados de profesionalidad. Esta es una linea de oferta imprescindible, pero que debe completarse, ahora de forma especial, con otras alternativas.
Teniendo en cuenta que, además, pretende llegar a 23.000 personas (el año pasado fueron 28.000) de las 258.000 que están en desempleo en Galicia, estamos ante un escenario necesitado de propuestas y, claro está, del dinero que las respalde.
Programas para la recuperación de la figura del aprendiz, formación con tecnología aprovechando las posibilidades de la web 2.0, una participación más directa de las empresas, un impulso en la linea de los cursos con compromiso de contratación, que se mantienen, la vuelta del ausente programa de Escuelas Taller, necesitado de redefinición pero muy necesario en este momento, etc… pueden ser algunos de los temas en los que trabajar para buscar más y mejores respuestas a la situación de nuestro mercado laboral.
Con los mismos objetivos y los mismos recursos, es decir, haciendo lo mismo, será difícil que logremos resultados diferentes. Y lo que es peor, no parece transmitirse una verdadera conciencia de la seriedad y las características del problema al que nos enfrentamos.
Estas últimas semanas he estado revisando algunas de las medidas que se implementan en otros contornos para acercar a las personas en formación al mercado laboral y responder a necesidades concretas de las empresas. Algunas son muy interesantes y se producen ante problemas no muy diferentes de los nuestros. Es el caso de los contenidos STEM del mercado anglosajón, especialmente en UK.
STEM es el acrónimo inglés para Science, Technology, Engineering and Maths. En realidad se trata de contenidos específicos que tratan de mejorar la capacitación de las personas en estas áreas. Nace en el marco de las cualificaciones británicas pero está hoy presente en ámbitos que van desde la formación en general al programa de aprendices británico, el Apprentices.
Este programa oferta la oportunidad de aprender y desarrollarse profesionalmente en profesiones y áreas STEM, a personas jóvenes que no completaron su formación. Comprobar la oferta formativa de STEM dentro de este marco, nos muestra nuevas posibilidades.
Y no es que no se oferten contenidos STEM, o que en España no se intenten soluciones. De hecho hemos contribuido a luchar contra este problema con ideas y proyectos bien interesantes. Desde las Escuelas Taller al contrato de aprendizaje, pasando por la extensión y adecuación de prácticas en FP, hemos venido mejorando las respuestas a este inmenso problema del desempleo juvenil y de la inadecuación de las personas al mercado de trabajo.
El caso es que, como decía, es tiempo de propuestas, tiempo de diseñar respuestas y de aventurarse a programarlas. Tiempo de innovar, con todos los riesgos inherentes. Es evidente que ya no se trata sólo de contar con una fuerza laboral más formada. Debemos contar con nuevas competencias (habilidades, conocimientos, actitudes) en contenidos muy determinados, para lograr un alto grado de especialización y polivalencia. Aunque esto parezca antagónico, es una de las demandas del mercado laboral.
Buenas tardes Alberte,me ha parecido muy interesante el artículo, y estoy de acuerdo con las ideas e inquietudes que compartes, pero he echado de menos alguna referencia a todos los desempleados que estamos titulados, queremos seguir formándonos, pero en materias que nos ayuden la inserción en el mercado laboral, crees que hay una oferta adecuada para este sector?Muchas gracias por hacerme partícipe de tu blog.Un saludo. Marta Alonso Romero
Muchas gracias por el comentario y por visitar el blog !!Como muy bien dices existe una gran falta de oferta formativa que ayude a las personas con titulaciones universitarias o superiores a adaptarse al mercado laboral. Desde mi punto de vista las lineas y los contenidos que se ofertan en los últimos años de la formación o cuando se termina, es muy escasa. Por lo menos las que yo conozco.Tampoco es que tenga un conocimiento extenso de la oferta pero en mi trabajo diario si me encuentro con muchas personas muy formadas alejadas de la tecnología o de otras áreas importantes para el mercado laboral de hoy. Estoy pensando en las posibilidades de adaptación de lo aprendido a las necesidades y características del mercado de trabajo. Desde mi punto de vista sería muy interesante que las personas con formación conozcan las posibles necesidades a las que pueden responder en este nuevo mercado laboral, tan condicionado por la tecnología.Me parece muy interesante lo que oferta Feuga http://www.feuga.es/ pero claramente insuficiente. Y me parece muy interesante que señales este punto, ciertamente no mencionado en la entrada, porque yo también creo que resulta clave para mejorar las posibilidades de desarrollo profesional.Muchísimas gracias por pasarte, por participar y por tus palabras.
Desde mi talante optimista, sigo pensando que con los mismos recursos que venimos disponiendo, deberíamos conseguir mejores resultados que hasta ahora! como bien dices ( y gracias a nuestra experiencia) sabemos en lo que falla el sistema y lo que demanda el tejido empresarial, ¿qué es entonces lo que falta o falla? coordinación entre agentes sociales y poder político ( para cambiar normativa…)? desilusión o pocas ganas??..relamente se podrían hacer mas y mejores cosas…
Muchas gracias por pasarte y comentar Yolanda.La verdad es que yo creo que han cambiado demasiadas cosas en la actividad de las empresas y en lo que tiene valor en el mercado. Se está redefiniendo muy claramente aquello por lo que estamos dispuestos a pagar y aquello por lo que no. Y hay otros cambios quizá más importantes, como la tecnología. El caso es que la actividad económica, lo que a algunos les gusta llamar el modelo productivo, ha cambiado ya.Como dices podemos hacer más y mejor con lo que sabemos y con los recursos que tenemos. Pero sigo pensando que son claramente insuficientes y echo de menos nuevos recursos e iniciativas. Por supuesto que estoy de acuerdo en que existen condicionantes derivados de la actividad política. Pero creo que, en este momento, no es un problema exclusivo de la clase política o de las organizaciones sociales. Todo el mundo conoce la parte negativa de la situación ( 5 millones de personas en desempleo, crisis, dificultades de los jóvenes…) pero no todos estamos siendo suficientemente conscientes de las características de esto a lo que nos enfrentamos.En cualquier caso estamos más que de acuerdo en que con los mismos recursos o con otros, es momento de poner motivación, compromiso, y si, muchas ganas. Y con esto tenemos mucho avanzado. De hecho creo que esa es la verdadera clave para que nuestro trabajo sea algo más eficaz.Y desde luego que con personas implicadas (como tu) todo será más fácil.De nuevo gracias por tu tiempo y tus palabras.
Hola Alberte,Interesante artículo. En lo que tiene que ver con las formaciones AFD estas no están nada adecuadas a la demanda laboral. Yo ahora estoy de orientadora laboral en la Univerdidad y a los recien titulados que me piden formaciones complementarias no les sirven los cursos que oferta el SPEG. Tienen que pagar masters universitarios( "los mas baratos") u otras formaciones que cuestan un ojo de la cara.Ahora estamos impartiendo los Obradoiros de Emprego (15 horas) y vemos que existen muchisimas dudas, que están perdidos y que no saben como defender esa formación que han adquirido. Me encuentro con chicos y chicas con hasta 5 masters y ahí están esperando a que alguien le contrate.Pienso que hay que darle una vuelta bien grande a la Formación reglada, y las empresas se tienen que comprometer mas en ofrecer formación a sus recien empleados , hay que cambiar la mentalidad de comienzo a trabajar y ya me se el puesto, están muy mal acostumbradas.No he podido saludarte personalmente en AEMOS felicitarte por tu ponencia.SaludosMª Angeles Manzanares
Muchas gracias por pasarte y por tus palabras.Mi experiencia con las personas tituladas es muy similar a la tuya. Además compartimos el punto de vista: hay que darle una vuelta a la formación pero también hay que cambiar, y mucho, el cómo se acercan las personas al mercado laboral.Yo también he tenido esas sensaciones. Me refiero a que alguna gente titulada está perdida a la hora de defender y mostrar lo que saben hacer y otras personas creen que la formación universitaria es suficiente para desenvolverse profesionalmente. Y el ingreso en el mercado laboral es algo largo y costoso. Como tu, pienso que es urgente abordar este tema. Se deben implementar medidas que acerquen el mercado laboral a las personas tituladas. Además, hoy la tecnología facilita mucho este trabajo. Pero claro, es que es necesario que hoy una persona titulada tenga un mínimo conocimiento de un segundo idioma, sea creativa y utilice la web 2.0. En este sentido quería preguntarte ¿Que grado de idiomas y de uso de la tecnología tiene las personas tituladas con las que trabajas?Y me encanta tu último párrafo, que suscribo plenamente. Uno de los principales retos es redefinir el papel de las empresas. Tienen que ser más protagonistas, participar más directamente, y no sólo de forma indirecta. Confío en que lo que está pasando nos convenza a todos de que en las personas, especialmente en las más formadas, está el valor que nos puede sacar de esta. Son las personas las que nos harán más competitivos, no sólo las medidas de uno u otro tipo.Como digo espero que esto que nos está sucediendo nos haga ver más claramente la necesidad (obvia) de contar con personas formadas y conocedoras de su ámbito profesional en una perspectiva global. La competitividad de todos y las posibilidades de generar empleo parecen pasar por aquí.Que pena que no pudiéramos hablar el día de Aemos. Espero poder hacerlo en cuanto tengamos oportunidad. Y que sea en breve.De nuevo, gracias por tu comentario y por tus palabras
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